La Enabol y los representantes de la empresa china GMB en Bolivia
entraron en contradicciones sobre los últimos plazos para la entrega de
los dos remolcadores y 16 barcazas.
“Las 16 barcazas y dos empujadores estarán partiendo a Bolivia en 90
días”, declaró el capitán de fragata Evalth Mauricio Velazco, jefe de la
Unidad de Transporte Naviero, representante de Enabol en China a
Página Siete, lo que significaría en promedio en el mes de septiembre.
Sin embargo, el abogado de GMB en Bolivia, Carlos Hur, y el
representante legal, Lee Jongsoo, aseguraron ayer que se entregarán
todos los bienes en el mes de agosto.
Enabol y la GMB suscribieron al menos cinco adendas ampliando los plazos
para la entrega provisional o definitiva de los bienes, que de acuerdo
al contrato inicial estaba previsto para septiembre de 2010, luego
existieron otras fechas de entrega, el último que se conoce es de
noviembre de 2011, aunque también fue incumplido.
Por este último hecho, el Ministerio de Defensa informó que se aplicó una penalidad en contra de la empresa china GMB.
El traslado del material naviero depende primeramente de la liberación
de los remolcadores del astillero que están embargados. Se conoce que
Enabol habría entrado a “terciar” en el proceso legal y así agilizar la
liberación de los equipos, pero asimismo se requiere de mano de obra
para concluir los remolcadores.
Según las respuestas escritas enviadas ayer a Página Siete por el
gerente general de Enabol, Freddy Ballesteros, “una vez que los
remolcadores sean liberados del embargo, Enabol procederá recepcionar en
el estado en que se encuentran para posteriormente iniciar las acciones
legales que correspondan”.
Lee Jongsoo, representante legal de la GMB en Bolivia, admitió que
Bolivia sufre un perjuicio por los atrasos que existieron en la entrega
de las barcazas y los remolcadores. “Eso sentimos, es nuestra
dolencia”, dijo al ser consultado sobre el tema.
Acotó que se hacen los esfuerzos entre GMB y MSR para “garantizar” que
los remolcadores se liberen del astillero embargado, se concluya la
construcción y se entregue definitivamente.
Según el proyecto, las barcazas y los remolcadores debían contribuir a
la exportación del yacimiento de hierro del Mutún hacia el océano
Atlántico y generar ganancias para el Tesoro General del Estado
boliviano y fortalecer el desarrollo de la Amazonia.
http://www.paginasiete.bo/2012-07-11/Nacional/Destacados/4Nac00311-03.aspx
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